Un día te voy a comer.
Algún día me besarás,
Algún día te comeré.
No será un día especial,
Que tú pudieras prever,
Y jamás olvidarás,
Todo lo que te voy a hacer,
Seguro que pedirás
Que te deje de morder,
Más de nada servirá.
Pues contigo acabaré.
Empezaré por tus pies;
Así no podrás andar,
Poco a poco subiré,
Sin dejarte de besar,
Lamiendo toda tu piel,
Cada rincón y lugar,
Con dientes acariciaré,
Mis labios te morderán,
Aún no te empieza a doler,
Al principio gozarás,
Pues yo te daré placer.
Y cuando me pidas más,
Entonces, comenzaré
A comerte de verdad.
Y ya no me detendré,
Aunque empieces a sangrar,
Ignorando tu gritar,
Y con un sumo placer,
Empezaré a degustar
Tu sangre, tu carne, tu piel…
Un palpitante manjar.
Un día te voy a comer,
Y ese día… te enterarás.
